Por qué nos cuesta tanto aceptarlo. Al concluir cada
etapa decimos que es que Movistar no le ayudó, que Valverde pedaleó por su lado,
que el viento se lo impidió o incluso, que Froome estaba dopado.
Por:
CONDORITO
Por qué nos cuesta tanto aceptarlo. Al concluir cada
etapa decimos que es que Movistar no le ayudó, que Valverde pedaleó por su
lado, que el viento se lo impidió o incluso, que Froome estaba dopado.
Pero jamás le quitamos la capa a nuestro superhéroe para entender que hoy por
hoy las piernas no le dan para ganarle el Tour a su supervillano.
El año pasado fue igual, culpables todos menos Nairo. Llegó a los Alpes perdiendo
más de tres minutos los cuales le dividimos la responsabilidad al viento, y a que ‘Nairo
no se esforzó en seguir a Froome porque se estaba guardando para los Alpes’. No
pensamos que quizás se quedó sin gasolina, y que en los Alpes, cuando había que
atacar o atacar, la fuente de energía que guarda en su espíritu fue la que le permitió descontar esos casi dos minutos.
Lo que pasa en mi país es que somos expertos en hallar
excusas a una realidad evidente que no requiere de mucho análisis. A veces
olvidamos que existen los ‘malos días’, o que simplemente las piernas de un
ciclista se pueden agotar y tienen un límite por estar hasta cinco horas encima de los pedales.
Pero como ‘Nairoman’ no es cualquier ciclista, sino el ‘mejor en la historia de
Colombia’, no puede tener días en los que se levante y diga “hoy no me
siento bien”, ni tampoco verse sin energía, pues como es ‘el mejor escalador’,
primero se quedan las motos antes que él.
Entonces vienen las críticas al contexto: “que fue
Valverde que lo dejó tirado”, “que el Movistar no lo quiso ayudar”, “que el británico
tiene equipo y el colombiano no”, “que la organización quiere que gane Froome”,
la más ridícula: “que Nairo está reservando energía para el final”, algunos
hasta fantasean y tildan a Froome de miedoso, afirmando que “prefiere atacar
ahorita porque sabe que pierde en los Alpes con Nairo”. Muchas bombas de agua
para el resto, pero nunca Nairo se quedó sin piernas.
Al fin y al cabo estas extremidades son las protagonistas. Si están
bien, no hay trabajo de equipo que las detenga. Si están mal, no hay trabajo de
equipo que las arrastre. O sencillamente hay otras mejores, más capacitadas,
que incluso pueden decidir a qué ritmo pedalean las otras en toda la competencia.
Quizás Valverde no es el ‘Checho’ Henao de Nairo que todos creíamos. Quizás
Movistar si quiere ayudar a su líder como el Sky, pero no puede. Quizás a Nairo
sí le dan las piernas, pero tal vez a Froome le dan mucho más.
A veces hay otro que es mejor, punto. No es para
enredarse ni sacar excusas. No siempre somos el ‘pueblo perseguido’ que nombró
Gabriel Meluk en su columna de El Tiempo,
que vive preparado para las denuncias a quienes no quieren dejarnos ganar
usando ‘mano negra’. Que esta derrota en el Tour nos sirva para entender. No es
como decimos siempre, que ‘a los colombianos no nos vencen, sino que nos hacen perder’.
santiagopoveda.smart@gmail.com
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Post: Al menos podio Nairo, vamos…
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